A pesar de las inversiones anunciadas por 20 mil mdp en esta frontera, las empresas locales no tienen cabida.
Tras la visita del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien anunció inversiones históricas para Tijuana, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) manifestó su inconformidad por la poca apertura que se ha dado a las empresas locales para participar en las obras.
“Estamos viendo una inversión como nunca en Baja California y las empresas constructoras locales no estamos participando como quisiéramos. Creo que la Sedena sí nos está comiendo el mandado, por decirlo de una manera coloquial, y nos gustaría que hubiera mucha más apertura para la iniciativa privada”, apuntó el Ing. Gabriel Vizcaíno, presidente de la CMIC Tijuana.
El dirigente aseguró que las empresas han demostrado ser los constructores de las ciudades, y aclaró que no se trata de señalar, sino de que incluyan a las empresas locales en las obras.
“Es una sorpresa porque nunca se había visto en Baja California, y menos en Tijuana, una inversión de este tamaño a nivel federal, 20 mil millones de pesos, y eso lo reconocemos como ciudadanos, pero como empresarios de la construcción estamos un poco olvidados en esa asignatura”, anotó.
Las obras que anunció el primer mandatario hace unos días en Tijuana fueron el Viaducto Elevado y el acceso a la Garita Otay II, donde se invertirán 12 mil y 8 mil millones de pesos, respectivamente, sin embargo, dijo, son obras que ejecutará la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), como es el caso, también, de la planta de tratamiento de San Antonio de los Buenos.
“Quisiéramos encontrar la manera de que nuestras empresas pudieran participar en esas obras, ya que siempre ha sido un factor determinante el gobierno, con el que siempre hemos trabajado de la mano”, dijo.
El Ing. Vizcaíno recordó que cuando se construyó la garita El Chaparral, de la cual se hizo cargo también la Sedena, se otorgaron subcontratos a las empresas locales, por lo que es algo que sí podría ser viable.
“Tenemos empresas que hacen obra civil, movimiento de tierras, proyectistas, entre otros, por lo que sí podríamos tener subcontratos y es algo que podría generar una derrama económica en la ciudad, toda vez que la industria de la construcción impacta en muchos otros sectores”, argumentó.
Finalmente, el líder de la CMIC Tijuana mencionó que sí se han tenido algunos acercamientos y, aunque en una primera instancia les dijeron que no era posible participar en las obras federales, el organismo no quita el dedo del renglón para que se pueda llegar a un acuerdo.
